A continuación podrás examinar los criterios actuales para diagnosticar un cuadro depresivo según el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM-IV, que es el referente más utilizado por los profesionales de la psicología. No obstante, sé prudente en las conclusiones que saques después de la lectura de los síntomas ya que aunque te puedas identificar con varios (o todos) los síntomas, la valoración de la gravedad o las peculiaridades de la depresión corresponde a un profesional con experiencia.
Estos son los criterios de evaluación y diagnóstico de la depresión:
A. Presencia de cinco (o más) de los siguientes síntomas durante un período de 2 semanas:
B. Los síntomas no cumplen los criterios para un episodio mixto (maníaco-depresivo).
C. Los síntomas provocan malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo.
D. Los síntomas no son debidos a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (p. ej., una droga, un medicamento) o una enfermedad médica.
E. Los síntomas no se explican mejor por la presencia de un duelo (p. ej., después de la pérdida de un ser querido), los síntomas persisten durante más de 2 meses o se caracterizan por una acusada incapacidad funcional, preocupaciones mórbidas de inutilidad, ideación suicida, síntomas psicóticos o enlentecimiento psicomotor.